La esencia de la cocina tradicional actual

España es sinónimo de buena vida, que en gastronomía quiere decir  riqueza de colores, sabores y texturas. Hay pocos países que tengan tanta variedad de paisajes, vinos y gastronomía. Precisamente la historia de la gastronomía española es la historia de un continuo intercambio de culturas entre las propias regiones que conforman la península ibérica y un rico legado de relación histórica con el resto del mundo. Durante más de cuatrocientos años España mantuvo una relación privilegiada con América Latina.

Pero la historia de la gastronomía española es también la historia de la recepción de un legado realmente valioso, singular y único en el contexto europeo: la gastronomía árabe, tan extendida en nuestros originales y ricos postres que convivió con nosotros por ochocientos años. La cocina española une los estilos cantábrico, mediterráneo, pirenaico, sureño y de interior, en una mezcla de ingredientes muy variada y saludable, en una evolución histórica de más de 2000 años, en la que hay influencias cristianas, árabes y judías. Algunos estarán pensando que la italiana con mucho menos legado está más extendida en el mundo a base de pastas y pizzas. O que la variedad y entidad de la gastronomía china no deja sombra para otra. Sin duda, el panorama de la gastronomía internacional deja pocos huecos.

Pero al igual que es la hora de los vinos españoles que triunfan en el mundo, o de un Ferrán Adrià que secuestra las portadas de los diarios más influyentes del planeta, hay una puerta para nuestra cocina que se abre con fuerza y que cuanto más se conoce, más se admira. Creaciones mimadas que se elaboran en base a la comida de las madres y las abuelas, que dan la sensación de revivir el pasado, o por lo menos de rememorarlo, gracias a sus sabores. Por ejemplo, en algunos asadores en Madrid podemos disfrutar del tradicional lechazo. Se puede elaborar al horno y en cazuelas de barro, servido a los comensales caliente y con la carne exterior crujiente. Uno de los mejores acompañamientos a la hora de servirse caliente es el vino. Los lechazos cuentan con su correspondiente denominación de origen y fecha, lo que garantiza la alta calidad y frescura de unos corderos excelentes.

En suma,  la cocina española atrae a un mercado en torno a la tradición y la modernidad, aunando en sus fogones excelentes guisos, ensaladas, pescados, carnes y postres. En la cocina española actual conviven dos realidades: la cocina clásica y popular fundamentada en la tradición, y la cocina actual que emplea las más novedosas e ingeniosas técnicas de cocina de autor, con cocineros que han alcanzado fama internacional reconocida. A pesar de ello la cocina clásica posee unas raíces religiosas muy profundas. Algunas formas de comer típicas de las regiones españolas se han internacionalizado, como por ejemplo, las tapas.

Todo el buen hacer de nuestra gastronomía, sus conocimientos de cocina y su continua exigencia para utilizar siempre los productos más frescos y deliciosos del mercado, han dado paso a que en muchos restaurantes puedan darse cita todos los placeres de nuestra gastronomía más auténtica.

Restaurantes pensados para complacer a toda la familia (II)

Pero los platos no son el único factor a tomar en cuenta a la hora de pensar en un público infantil. Existen diversas opciones para mantener alegre a un niño antes, durante y después de una comida. Esto no solo será atractivo para él, sino también para sus padres, quienes probablemente sean los encargados de pagar por lo que él consuma.

Algunos restaurantes cuentan con zonas exclusivamente dedicadas para el entretenimiento de los niños. Tomando el ejemplo de los restaurantes de comida rápida, algunos restaurantes han implementado lugares para que los niños se diviertan antes o después de disfrutar de su comida. En estos espacios se suelen incluir juegos o actividades para ellos.

Pero por temas de espacio o de costo, no todos los restaurantes pueden implementar estas zonas. En estos casos, es posible recurrir a otras estrategias para entretener al público infantil. Por ejemplo, al reverso de los tapetes se pueden incluir juegos, crucigramas, sudokus, laberintos, etc. Con ello, los niños se mantendrán siempre entretenidos.

Por lo general, cuando una familia busca un restaurante donde comer, no buscan restaurantes para niños, sino restaurantes donde toda la familia se pueda sentir a gusto. Por esta razón, es importante que un restaurante cuente con las estrategias necesarias para satisfacer a todo su público.

Restaurantes pensados para complacer a toda la familia (I)

Actualmente la gastronomía se encuentra en auge. Los chefs alrededor del mundo han cobrado un mayor protagonismo y, con ello, los comensales tradicionales se han vuelto más refinados y exigentes. Pero los restaurantes no deberían olvidar al público amante de la comida más sencilla, que no necesariamente significa menos sabrosa, que se concentra sobre todo en el público infantil.

Las innovaciones gastronómicas son un beneficio para todos. Por un lado, los chefs han alcanzado fama internacional y se han convertido en los artífices de un arte que causa fascinación alrededor del mundo. Por otro lado, el trabajo de estos chefs ha significado el descubrimiento de nuevos ingredientes y productos para la cocina, lo que significa también una vía para el desarrollo económico de muchas personas.

Pero el desarrollo gastronómico no debería dejar de lado a los niños, quienes tradicionalmente gustan de platos menos sofisticados. Por tanto, siempre será necesario que un restaurante tenga en su carta algún plato sencillo que sea atractivo para los menores de la familia.

Además, es importante tener en cuenta que no solo los niños disfrutan de esta comida más sencilla. Todos algunas vez se han visto tentados de comer algún plato elaborado con nuggets de pollo, o acompañado simplemente con un puré de patatas o patatas fritas.